Presidente Abinader, Haití y el respeto a nuestra nacionalidad
- revistalaprensa55
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POR RAFAEL SANTOS
El Presidente Luis Abinader ha respondido a la altura de un mandatario que busca proteger nuestra nacionalidad a costa de lo que sea. Las 15 medidas para enfrentar la migración ilegal y garantizar la soberanía nacional ante la crisis haitiana, es algo que todos y sin mirar banderías políticas o credo religioso debemos aplaudir.
Por más que veamos que ciertas naciones de las llamadas del “primer mundo” estén dizque tratando de resolver la problemática en la vecina nación, para quien escribe estas líneas, eso no es más que una teatralidad para paliar una situación que prácticamente se les ha salido de control.
El liderazgo de esas naciones sabe perfectamente lo que hay que hacer con el tema de la inestabilidad haitiana y no lo hacen. El ex-policía y líder paramilitar haitiano, Jimmy Chérizier, mejor conocido como "Barbecue", ha dado a demostrar y con fieros hechos, que tiene más fuerza que todas las naciones qu unidas han penetrado a ese país para “acabar” con la situación imperante.
Eso es algo extremadamente peligroso no solo para los vecinos desprotegidos haitianos, sino también para nuestro país que en un futuro a lo mejor no muy lejano, y de las cosas con este monstruo seguir como van, podríamos también estar bajo el dominio visceral y el terror psicológico de ese señor. De ahí es que las medidas tomadas por el Presidente Abinader deben ser apoyadas por todos los sectores y sin excepción.
Ha hecho bien el Presidente Luis Abinader en establecer esas 15 medidas, las cuales y aunque algunas nos suenen dolorosas, pero son muy necesarias, para con ellas iniciar el proceso de protección real de nuestro país.
Como país soberano, debemos establecer medidas que como estas tiendan a respetar nuestras leyes migratorias; es más, estas debieran ser mucho más contundentes, pues al paso que vamos, al tema no se le puede tratar con flojeras ni con ñoñerías, sobre todo, cuando en el panorama vemos que ciertos actores internacionales han volcado su atención de solución a esa problemática vía la unificación de la isla.
Somos de pensamientos, que en vez de cuestionar cuantas acciones se han emprendido para que los dominicanos nos empoderemos del tema en cuestión, lo que el liderazgo de los partidos políticos, las organizaciones de base de nuestra sociedad, entiéndase los sindicatos, los empresarios serios de este país y todos aquellos a los que en verdad les duela nuestra nacionalidad, lo que deben hacer es, unir criterios y todos abrazarnos por la causa nacionalista.
Es hora ya, pero de manera decidida, que mediante estrategias muy bien planificadas nos sumamos al gobierno con un plan a mediano y largo plazo, en donde defendiendo primero los derechos humanos, pero sobre todo nuestra nacionalidad, crear bases profundas que finalmente nos puedan llevar por el camino más claro en pos del mantenimiento de nuestra soberanía, nuestra cultura, y la paz que hoy día y mientras tanto estamos respirando.